Carlos Arias anotó 21 puntos, Jorge Loucel agregó 18 y 6 rebotes, y el quinteto de Águila extendió la final del
Apertura 2015 de la Liga Mayor de Baloncesto (MLB) a un decisivo tercer partido al vencer 86-64 a El Rápido de La Unión
en el segundo juego ayer. Óscar Rivera añadió 13 unidades para los negro naranja, que alejaron la posibilidad de quedar eliminados en el gimnasio municipal de La Unión al afianzar la ventaja desde el inicio del choque, que se enfebreció durante algunos tramos.

Con solvencia y dominio, el equipo de Roberto Carrillo, intratable durante la fase regular del campeonato (registró 20
triunfos y ninguna derrota), alargó esta serie final al límite y ahora el primer campeón de la LMB se conocerá en un juego
que hoy podría programarse.
La defensa, el rebote y el buen repliegue ofensivo fueron los bastiones principales del conjunto migueleño, que terminó el duelo con expulsiones, para empatar 1-1 esta serie final que comenzó perdiendo 79-85 el sábado en el Adolfo Pineda.
En La Unión, bajo un calor soporífero, el público, que se registró en una considerable cantidad, se terminó de avivar por el inicio del partido. Y no fue para menos. El Águila inició como un automóvil sin límite de velocidad. Apareció alas primeras el
talento de Arias y Rivera, emplumados, que destellaron con sus tiros efectivos tanto por arriba como por abajo.
Además, el conjunto emplumado se mostró como una guarnición bien conectada en su defensa, que les permitió hilar transiciones finas desde la salida. Con eso, el conjunto de Carrillo tuvo al final de este periodo una ventaja de 31-11.
Para el segundo la dinámica no varió tanto, salvo que El Rápido intentó reaccionar, creyendo en que la remontada era
posible. Sin embargo, se encontró con un Águila siempre enchufado en todas sus líneas y lleno de argumentos ofensivos.
El partido vivaz del Águila se terminó opacando por el exceso de euforia del público unionense que roció con agua al cuerpo
técnico del Águila, lo que provocó la intervención de la Policía Nacional Civil (PNC) para sacar a algunos aficionados. Además
fueron expulsados los aguiluchos Carlos Palacios y Juan Reyes, entonces suplentes, por invasión a la duela.
Ya en el tercer cuarto, el Águila decidió seguir el guion de su juego cerebral ante un El Rápido que le costaba encontrar
con eficacia el aro contrario y terminó el rollo adelante, 66-47.

La última parte del partido se tornó más intensa. Águila no bajó las plumas con sus tempestivas llegadas a la pintura contraria y El Rápido intentó fraguar una cruzada que incluyó una buena dosis de fe y juego con garra, pero la tarde había sido
clara, la victoria era de Águila, que alargó su vida en esta final que se definirá la otra semana.

Fuente://fesabal.com/