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El próximo jueves 5 de junio, el mundo del baloncesto centrará su atención en el inicio de las Finales de la NBA 2025, donde Oklahoma City Thunder e Indiana Pacers se enfrentarán en una serie que promete ser histórica. Ambos equipos llegan a este escenario con el mismo objetivo: conquistar el campeonato de la liga y escribir sus nombres en los libros de historia.

Sin embargo, más allá de la lucha por el trofeo, estas Finales también serán un nuevo capítulo en la rivalidad entre las dos conferencias: el Este y el Oeste, que han competido durante décadas por el dominio en títulos de la NBA.

Con la victoria de los Boston Celtics en la temporada pasada (2024), la Conferencia Este amplió su ventaja en el conteo histórico de campeonatos de la NBA, alcanzando un total de 41 títulos frente a los 36 de la Conferencia Oeste.

Ahora, con los Indiana Pacers representando al Este y los Oklahoma City Thunder defendiendo el honor del Oeste, estas Finales no solo definirán al campeón de 2025, sino que también sumarán un nuevo capítulo a la eterna rivalidad entre ambas conferencias.

El dominio histórico de la Conferencia Este

Desde la fundación de la NBA en 1946, la Conferencia Este ha sido un pilar del éxito en la liga, con equipos legendarios como los Boston Celtics y los Chicago Bulls marcando épocas doradas. Los Celtics, en particular, han sido el estandarte del Este, con un récord de 18 campeonatos, el más alto en la historia de la NBA.

Su último título, obtenido en 2024, permitió al Este ampliar su ventaja histórica sobre el Oeste, consolidando su dominio en la liga. En total, equipos del Este como los Philadelphia 76ers, Detroit Pistons, Miami Heat y New York Knicks han contribuido al éxito de la conferencia, con actuaciones memorables y jugadores legendarios.

Este legado de grandeza es lo que los Indiana Pacers buscarán mantener vivo en las Finales de 2025, mientras intentan añadir su primer campeonato al historial de la conferencia.

El resurgir del Oeste y la lucha por el equilibrio

A pesar del dominio histórico del Este, la Conferencia Oeste ha tenido su propia era de grandeza, especialmente en las últimas décadas. Equipos como Los Ángeles Lakers, con 17 campeonatos, los Golden State Warriors y los San Antonio Spurs han sido fuerzas dominantes en la NBA, cerrando la brecha histórica con el Este.

El Oeste ha sido testigo de un resurgir reciente, con equipos jóvenes y dinámicos como los Denver Nuggets, campeones en 2023, y ahora los Oklahoma City Thunder, que buscan regresar a la cima del baloncesto tras años de reconstrucción.

Los Thunder, liderados por el MVP de la temporada Shai Gilgeous-Alexander, representan la esperanza del Oeste de acortar la distancia en el conteo histórico de títulos y demostrar que esta conferencia sigue siendo una de las más competitivas y emocionantes de la liga.

Indiana Pacers: El representante del Este en busca de su primer título

Para los Indiana Pacers, estas Finales representan una oportunidad única no solo para ganar su primer campeonato de la NBA, sino también para reafirmar el dominio histórico del Este. Fundado en 1967, el equipo ha tenido éxito en la ABA, pero un título de la NBA sigue siendo esquivo. Con Tyrese Haliburton liderando al equipo, los Pacers han demostrado resiliencia y determinación a lo largo de la temporada y los playoffs.

Haliburton, conocido por su estilo de juego elegante y su capacidad para orquestar la ofensiva, será el encargado de guiar a Indiana en esta histórica serie. Además, el equipo cuenta con el apoyo de figuras como Myles Turner y Pascal Siakam, quienes buscarán desempeñar roles clave en ambos extremos de la cancha.

Oklahoma City Thunder: La esperanza del Oeste

Por su parte, los Oklahoma City Thunder llegan a estas Finales como uno de los equipos más prometedores de la liga. Tras terminar como el mejor equipo de la Conferencia Oeste en la temporada regular, los Thunder han demostrado ser un rival formidable, especialmente jugando como locales, donde registraron un impresionante récord durante los playoffs.

Shai Gilgeous-Alexander, el actual MVP de la liga, ha sido el motor del equipo, promediando números espectaculares que lo colocan entre los mejores jugadores de la NBA. Su capacidad para anotar, asistir y liderar en momentos clave convierte a los Thunder en un serio aspirante al título. Con un núcleo joven y talentoso, Oklahoma City busca añadir su primer campeonato a la historia de la franquicia y reforzar la posición del Oeste en la lucha histórica de títulos.