Los Sixers han arrancado en serio la temporada de la NBA con marca perfecta en cuatro juegos. Los Timberwolves fueron las últimas víctimas y de hecho fueron una presa relativamente fácil al caer 117-95 con lo cual se terminó el invicto de Minnesota.
Sin embargo, el partido quedó marcado por la campal que se armó en la duela, después de que Joel Embiid y Karl-Atnhony Towns comenzaran una pelea, la cual terminó inevitablemente con la expulsión de ambos.
Con poco más de seis minutos por jugarse en el tercer cuarto, cuando Embiid le sacó el balón a Towns en la ofensiva de los Timberwolves, pero al momento de desarmar a Towns, Embiid dejó un recuerdito, el cual provocó primero una serie forcejeos con los brazos y éstos se transformaron después en empujones que llevaron a los jugadores al suelo.
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Todo esto ocurrió mientras los Sixers pasaban a la ofensiva y al percatarse el resto de jugadores recorrieron la duela de regreso al otro extremo para separar a los rijosos. Ben Simmons tuvo que someter a Towns contra la duela antes de que fueran expulsados.
Embiid festejó después de la pelea, al considerarse ganador de la misma y haciendo muestras sobre sus habilidades como boxeador, por lo que se fue a los vestidores elogiado por el público.
