The Manu Ginóbili experience: un partido de la NBA por dentro
EMANUEL GINÓBILILunes 20 de mayo de 2013 | 15:18
The Manu Ginóbili experience: un partido de la NBA por dentro
canchallena.com estuvo el AT&T center de San Antonio para ver la victoria de los Spurs ante los Grizzlies
Por Ariel Tiferes | canchallena.com
Manu Ginóbili, un espectador de lujo. Foto: AFP
SAN ANTONIO.- Los 35 grados que calientan el cemento de la enorme playa de estacionamiento del AT&T Center de San Antonio no amedrentan a los fanáticos.
Falta menos de una hora para el comienzo de la final de la Conferencia Oeste de la
NBA y -pese a que el estadio aún está lejos de colmarse- los hinchas del equipo más
popular de la ciudad se acercan ininterrumpidamente.
La inclemente temperatura exterior se transforma en un agradable oasis de negocios y entretenimientos cuando los asistentes al primer partido entre los Spurs y los Grizzlies atraviesan la primera puerta de la cancha. Para ingresar, no hay que esperar en largas
colas o sufrir el voluble ánimo de los policías que nos acostumbra el fútbol argentino
. Desde el control de metales del inicio hasta el último acomodador, todos sonríen y
agradecen nuestra paciencia.
La determinación de cualquier persona por llegar al asiento adecuado chocará antes
con cientos de distracciones. Mariachis en los pasillos, cientos de restaurantes temático
s, negocios con toda clase de merchandising con el equipo emblema de la ciudad y
hasta un recital de una banda de rock serán algunos escollos que deberá superar el
espectador que sólo quiere ver básquetbol.
Aquí nadie quiere pasar desapercibido. La mayoría luce una camiseta del equipo
(la 20 deManu Ginóbili es una de las más repetidas entre hombres y mujeres), pero
también sobresalen los que se visten elegante y los que se disfrazan para lograr unos segundos de fama en la transmisión de la tele.
Una vez en nuestra butaca, el show invita a que nos entreguemos a él. Luego del himno
de los Estados Unidos en versión rockera, una increíble superproducción con las mejores
jugadas del equipo en los playoffs hace que queramos saltar a la cancha a comernos al
equipo de Marc Gasol. Una de las imágenes de la compaginación hace enloquecer al
estadio: el triple de Manu que le dio la victoria a los Spurs frente a Golden State, hace
unas semanas, en el primer partido de las semifinales de la conferencia.
Apenas se produce el salto que da comienzo al partido, aparece el gran protagonista de
la noche (por lo menos para los que no tenemos la suerte de ver un espectáculo como
este muy a menudo). No se trata de Tim Duncan, Parker o nuestro querido Manu. Es el encargado de musicalizar el partido. Como si se tratara de un relator multimedia o un
DJ, cada ataque, cada defensa, cada jugada destacada será correspondida con un
sonido o video que se escucha en un volumen que no tiene nada que envidiarle al de un
boliche para adolescentes.
La mascota de los Spurs. Foto: AFP
Los Spurs se adueñan rápidamente del trámite del juego, pero el show paralelo sigue su
curso inalterable. Para muchos fanáticos, la pantalla gigante es casi tan importante
como la cancha. Desde la arenga del coyote (la mascota de los Spurs) hasta el show
de las bailarinas sexies, todo pasa por el enorme cubo con proyecciones en el centro
de la cancha.
Gracias a la cómoda victoria de San Antonio, es más fácil detenerse a ver los detalles de esta increíble y sincronizada organización. El martes, cuando vuelvan a enfrentarse
Spurs y Grizzlies en el mismo escenario, ojalá este cronista logre su cometido: prestarle
más atención al juego.
El color de las chicas. Foto: AFP
Fuente:
canchallena.lanacion.
