La serie estaba totalmente dada para que Cleveland Cavaliers quedara a un paso de acceder a las Finales de la NBA. Boston Celtics tenía todo en contra y sin Isaiah Thomas parecía que sus oportunidades eran mínimas pero un triple sobre la bocina de Avery Bradley le devolvió la esperanza a la franquicia que se quedó con la victoria 111-108 en condición de visitante.

El Quicken Loans Arena se vistió de gala para recibir a los vigentes campeones de la liga. Trece partidos consecutivos con victorias en playoffs y la oportunidad de imponer un nuevo récord en la historia de la NBA ante su público. Pero los Cavaliers no contaban que los Celtics con el orgullo herido y sin nada que perder aumentarían su nivel en defensa para no dar oportunidad alguna sobre todo en la segunda mitad.

En el primero y segundo cuarto todo parecía encaminado para una nueva victoria de la franquicia de Cleveland, los triples hicieron que tuvieran una ventaja máxima de 20 puntos en un momento dado del encuentro. Sin embargo, los de Brad Stevens recompusieron el camino en ataque y defensa para venir de atrás y hacer una remontada épica sin tener en cancha a su mayor estrella.

Avery Bradley con 20 puntos, 3 rebotes y 4 asistencias fue el héroe de la noche al hacer un triple faltando 0.1 segundos para finalizar el partido pero el gran nivel de Marcus Smart en la segunda mitad, con 27 puntos, 5 rebotes y 7 asistencias fue indispensable para que los Celtics se quedaran con la victoria. Los otros grandes destacados de la noche mágica en Cleveland fueron Jae Crowder con un ‘doble-doble’, 14 puntos y 11 rebotes y Al Horford con 16 puntos, 2 rebotes y 6 asistencias.

Una mala noche de LeBron James quien bajó notablemente sus números en este partido, gran parte de esto por la buena táctica en defensa de los de Stevens. 11 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias en el peor partido de post-temporada para el alero en 2017. Kevin Love y Kyrie Irving llevaron la carga del equipo con 28 y 29 puntos respectivamente pero no les alcanzó para hacerse con la victoria.

Los Celtics encontraron el método para detener al rey y eso les permitió ganar cuando tenían todo en contra, gran rendimiento de todas las piezas del quinteto y la táctica utilizada por el entrenador jefe. La serie continuará en la noche del martes nuevamente en Ohio.

Fuente:www.basket4us.com/