España sabía que tenía que frenar el tiro exterior surcoreano y no se equivocó. Beon y Park sumaron seis triples casi consecutivos para mostrar la calidad del bloque y su peligro exterior, pero las españolas contaban con Sancho Lyttle que permitía que Corea no se distanciara en el marcador.

José Ignacio Hernández se vio obligado a parar el duelo para aleccionar a las suyas y ajustar la defensa para frenar el tiro coreano. El parón funcionó y España endosó un parcial de 8-0 para establecer el empate (23-23) al final de primer cuarto.

'La Roja' siguió empleándose a fondo en defensa, recibiendo sólo 5 puntos en los primeros minutos de un pobre cuarto (13-7) para ambos conjuntos, aunque la situación le permitía tener ligeras ventajas ante una Corea que vio como perdía a una de sus mejores jugadoras con la lesión de Park.

Bajón en el tercer cuarto

El combinado nacional, que dominaba el duelo (51-39), perdió la concentración en los instantes finales del tercer cuarto, lo que aprovecharon las surcoreanas para reducir la diferencia, con un triple sobre la bocina desde casi 9 nueve metros de Kim Jy para reducir aún más la diferencias (57-48).

Un último cuarto que no empezaba nada bien para las españolas. Las pupilas de Juan Ignacio Hernández se fueron del partido y lo pagaron caro. Las asiáticas no dudaron en aprovechar este regalo para ajustar el marcador (61-56) ante los nervios de 'La Roja', que veía cómo se le complicaba y dilapidaba su ventaja, echando por tierra el gran trabajo defensivo realizado en la primera parte.

Sin embargo, surgió la figura de la capitana Amaya Valdemoro, que cortó la sangría coreana y enderezó el rumbo de España, junto a Sancho Lyttle, máxima anotadora con 28 puntos, ante una combativa Corea del Sur, que el jueves dio la sorpresa venciendo en el estreno a Brasil y plantó cara a una España que ya está en octavos de final.