El baloncesto vuelve a brindar oportunidades académicas y deportivas para jugadores de Costa Rica

SAN JOSÉ (Costa Rica) - Atletas integrales de la Selección Femenina de Costa Rica obtuvieron Becas Académico Deportivas en México, para cursar estudios superiores y jugar baloncesto a la misma vez. Ellas son las hermanas Daniela Mora Coto de 24 años y María José Mora Coto de 20, además de Montserrat Martínez Calvo, de 19, otra de las niñas que también atraviesa esta enriquecedora experiencia.

La Federación Costarricense de Baloncesto (FECOBA) cree en estos proyectos porque son los que les darán a los deportistas costarricenses horas de entrenamiento y estudio y experiencias diferentes en otro país, para así poder fortalecer el baloncesto y a las selecciones nacionales de Costa Rica.

El vínculo de Costa Rica con las becas universitarias en México comenzó mucho antes, cuando en 1999 después de un Centrobasket, viajaron por primera vez jóvenes jugadores costarricenses a México para vivir sus primeras experiencias de estudiar en una Universidad, al mismo tiempo de jugar baloncesto.

Clifford Smith Araya fue uno de los precursores en el país en hacer carrera fuera de Costa Rica, jugando y estudiando en la Liga Universitaria de México en Puebla. Fue uno de los primeros jugadores costarricenses en emigrar al exterior para jugar baloncesto y estudiar al mismo tiempo, además de ganar varios torneos universitarios relevantes. Luego de su experiencia en México, a Smith se le dieron otras grandes oportunidades para mejorar su baloncesto, jugó en Estados Unidos en Southeast Community College en Nebraska (NJCAA) y en Barry University en Miami en la NCAA y fue parte de las selecciones nacionales de Costa Rica, menores y juveniles desde 1995 y mayores desde 1997 a 2013.

“Todo comenzó en 1997 cuando una selección nacional de Costa Rica fue a jugar a México un Torneo Centrobasket y el baloncesto costarricense tomó importancia en Puebla, México, y surgió la primera interacción con las universidades mexicanas como UDLA (Universidad de las Américas) y UPAEP (Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla), ambas interesadas en que los costarricenses jueguen y estudien en México, como mi caso y el de Jackie Acuña, tenidos en cuenta como fichas interesantes para contratar y poder jugar en México”, contó en FIBA.basketball.com, Clifford Smith Araya.

“Regresé a Costa Rica, después de haber jugado ese Centrobasket con 19 años, y mis padres me incentivaron a tomar esta beca. Buscaba establecerme en otro país, pero con el mismo lenguaje, el del baloncesto. Fue difícil dejar toda mi vida en Costa Rica, pero rápidamente me vinculé al equipo de las Águilas de UPAEP y tuvimos un año excelente combinado con el talento del equipo con figuras experimentadas con los nuevos que llegábamos. Ese año tuvimos el placer de ganar la CONADEIP, uno de los torneos universitarios más importantes de México, la Liga Nacional de Clubes, la Liga Corona Universitaria y la Liga Universitaria Nacional, el 99` y el 00` fueron años memorables para las Águilas, logramos hacer cosas que nunca otro equipo había logrado y para mí como extranjero en ese equipo fue una experiencia inolvidable”, contó.

En los últimos tres años, la oportunidad se lé dio a las hermanas Daniela Mora Coto y María Mora Coto, que comenzaron a jugar baloncesto a los 9 años, y compartieron equipo en la Selección Nacional de Costa Rica. Ambas obtuvieron becas en el Tecnológico de Monterrey, Campus Toluca. Daniela se graduó en 2018 y María continúa avanzando en la carrera universitaria, además de Montserrat Martínez Calvo, que está dando sus primeros pasos en el Tecnológico de Monterrey, Campus León.

Daniela Mora Coto juega de pivot y mide 1 metro 84 de altura, llegó a México con una beca deportiva a través de un contacto realizado por un entrenador de Costa Rica. “Es una experiencia muy bonita, no es algo fácil dejar a tu familia, amigos y a tu vida por irte a otro país, pero es una oportunidad inigualable donde sabes que vas a crecer y definitivamente lo haces, no solo creces como deportista, sino como persona, como profesional y valoras a tu casa y a tu familia. No lo veo como un sacrifico porque si amas algo y lo queres, no lo es. El baloncesto es algo muy importante en mi vida y no me arrepiento de haber tomado esta decisión porque me ayudó a crecer mucho como persona. Ojalá todos los deportistas pudieran vivirlo”, dijo Daniela en FIBA.basketball.com.

Por su parte, María Mora Coto de 1 metro 85 de altura, que juega de pivot llegó a México en enero de 2016. “Llegar a Tuluca fue muy importante, aprendí y crecí como persona y jugadora. Aprendí a cuidarme y a saber lo que es ser independiente, porque estás lejos de la familia y comenzas a valorar un montón de cosas. Como jugadora me ayudó a creer en mi misma y a explotar mi potencial. El nivel es muy alto en comparación al baloncesto de Costa Rica y me toca enfrentar a jugadoras que han sido selección mayor o que han tenido más tiempo en cancha del que yo he tenido”. Y agregó: “El baloncesto se vuelve una parte muy importante en tu vida, el deporte te prepara, te enseña responsabilidad, liderazgo y a controlar emociones y ser fuerte mentalmente”.

Para FECOBA los resultados son importantes, pero más allá de esto, lograr por medio del baloncesto crear este tipo de oportunidades es de suma importancia desde la actual junta directiva. Internacionalizar el talento y el desarrollo del baloncesto desde temprana edad, además de la participación en torneos continentales e internacionales. Para eso trabajará día a día en el fortalecimiento de sus selecciones juveniles y la partida de atletas del baloncesto, para adquirir nuevas experiencias tanto en lo deportivo como en lo académico, es de suma importancia para la Federación.

“Es difícil conseguir una beca, hay que dejar muchas cosas y requiere de mucho esfuerzo. Aún me falta mucho por aprender, pero lo haré en beneficio propio y por el baloncesto de Costa Rica. Es muy lindo poder estudiar lo que a uno le gusta y hacerlo de la mano de jugar baloncesto”, contó en FIBA.basketball.com, Montserrat Martínez Calvo, que mide 1 metro 67 de altura y juega de guardia.

“Fue muy impactante y sorprendente tener la oportunidad de venir a México. Tuve que dejar a mi familia lejos, pero esta experiencia me ha hecho crecer en lo deportivo y en lo personal, me hace más independiente y fuerte. Me hace ver que el futuro se acerca y que hay cosas que tengo que hacer por mi cuenta. El solo hecho de tener que cocinarme, es bastante. Es un cambio muy grande a nivel deportivo, un nivel muy distinto al de mi país y me he puesto retos muy grandes. Esto me va abrir muchas puertas y hacer conocer mucha gente en una cultura totalmente diferente”.

Como uno de los objetivos, FECOBA se ha dado nuevamente la tarea de buscar oportunidades para las jugadores y jugadores costarricenses. “En una época se exportaba talento costarricense a países como México y Estados Unidos, pero luego y durante años no se continuó promoviendo este tipo de oportunidades”, añadió Clifford y agregó: “La preparación es muy importante porque se van de sus casas a una corta edad y necesitan tener las bases lo suficientemente fuertes y entender que se está haciendo una inversión en su educación y con posibilidades deportivas para seguir creciendo. Es muy importante que se sigan promoviendo este tipo de relaciones, de crear sociedades con diferentes países y federaciones internacionales para encontrar espacios para el talento del baloncesto costarricense”.

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