Hace unos minutos, ha finalizado el encuentro por la medalla de bronce del Mundial de baloncesto de China 2019 que enfrentaba a Francia y Australia. Las dos selecciones venían de caer dolorosamente en semifinales, sobre todo los australianos, pero todavía podían seguir peleando por conseguir al menos un metal.

A priori, se esperaban dos selecciones muy serias y acumulando muy pocos errores en defensa. El resultado tan poco abultado el encuentro (67-59 a favor de Francia) así lo demuestra. Australia comenzó marcando el ritmo del partido, liderando el resultado durante mucho tiempo de juego. Al descanso, la selección de Oceanía se iba con una ventaja de nueve puntos (21-30).

Francia se vio revitalizada a partir del tercer cuarto. Defensas magistrales, como la realizada por Nicolas Batum durante ese periodo, son las que permiten remontar un encuentro. Y así fue. De pasar a perder por 15 puntos, los franceses se pusieron tan solo a cuatro de diferencia.

El ritmo de la Selección Francesa no había quien lo parase. La remontada se estaba culminando y los australianos observaban atónitos. Se les estaba escapando, una vez más, el conseguir una medalla de un Mundial.

Los mejores jugadores del encuentro han sido Nando De Colo (anotando 19 puntos en su contador personal), Evan Fournier (16 puntos en total para el jugador de Orlando Magic), y Andrew Albicy, que pese a no anotar ni un punto en los tres primeros cuartos, encestó tres triples seguidos en los seis minutos finales que terminaron por destrozar a Australia.

Con todo esto, Francia suma ya su segunda medalla en la historia de los mundiales, tras revalidar el bronce logrado en el Mundial de España 2014 contra Lituania. Australia, por su parte, sigue con el contador a cero