Caitlin Clark arrancó su andadura como profesional en la WNBA con luces, sombras y una contundente derrota de sus Indiana Fever en la cancha de las Connecticut Sun por 92-71. El fenómeno del baloncesto femenino mundial comenzó su nueva aventura con 20 puntos y 3 asistencias, sufriendo mucho ante la dureza propuesta por la defensa rival. Con unos porcentajes malos, 5 de 15 en tiros de campo y un 4 de 11 en triples, la jugadora de 22 años batió un récord negativo de la liga estadounidense nada más empezar.
Con 10 pérdidas de balón, Clark se convierte en la jugadora de la WNBA que más ha descuidado la pelota en su estreno en la competición, superando la anterior plusmarca negativa de Cynthia Cooper en 1997, que cometió entonces ocho pérdidas.
La mayor anotadora de la historia del baloncesto universitario estadounidense no inscribió su nombre en el casillero de la liga profesional femenina de Estados Unidos hasta el minuto 5:24 del segundo cuarto, cuando se escapó de la marca defensiva para entrar hasta la cocina y anotar una bandeja plácida bajo el aro.
"Estoy decepcionada, y a nadie le gusta perder, pero no puedes machacarte mucho por un partido. Esto no ayudaría al equipo, y se trata de aprender y pasar página", comentó Clark, la gran atracción del estreno de la temporada 2024 de la WNBA anoche.
El efecto de la jugadora se notó a lo largo y ancho del territorio, y es que en Connecticut vendieron la totalidad de las 8.910 localidades de su pabellón para recibir la visita de la estrella rival, la primera ocasión desde 2003 que colgaban el cartel de aforo completo en un inicio de curso.
La primera jornada no dejó grandes sorpresas, y las New York Liberty derrotaron a domicilio a las Washington Mystics (80-85), las Minnesota Lynx hicieron lo propio con las Seattle Storm (70-83) y Las Vegas Aces celebraron su anillo ante su público con una victoria por 89-80 sobre las Phoenix Mercury, en un bonito duelo de ases entre la MVP A'ja Wilson (30 puntos) y Diana Taurasi (23).