El conjunto europeo tuvo todo el partido a su favor, hasta que pasó Corea y le puso incertidumbre a la clasificación de Serbia, que la terminó consiguiendo sobre el final. Por su parte, España sin complicarse le ganó a Canadá.
España 76-66 Canadá
El partido comenzó con las españolas abriendo el score. Las canadienses dejaron un espacio en el eje de la defensa para que Cristina Ouvina penetrara y encestara, sacó la falta y abrió tres. Ouvina era protagonista, quien ponía la intensidad y orden en cada ofensiva. Pero la respuesta fue rápida por parte de las canadienses que desde el perímetro se ponían a dos. Las españolas aprovecharon los espacios en ofensiva dejados por las canadienses, quienes pasaron de marcar en zona a defender uno a uno. A Canadá le costó la transición de ataque a defensa, y el balance no era del todo bueno, dejándole en libertad a España de continuar arriba en el marcador. Se fueron al primer cuartoo 23-13 a favor de España. El segundo arrancó siendo más cortado. Canadá empezó a encontrar los caminos en ataque, pero no en defensa, donde sostenían un doblaje a quien tuviera el balón. Las canadienses lograron poner un parcial de (10-4) estando 27-23 a favor de España. Esto obligó a las españolas a marcar en zona 2-3 sobre los últimos minutos. El desgaste sirvió para que las europeas generaran más goles desde la corrida y cancha abierta, las cortinas indirectas, y los pases extras que dejaban a una compañera sola para anotar. Finalizando el primer tiempo en tierras japonesas, a falta de 9,7 segundos Canadá colocó un triple que lo dejó sólo a 6 puntos abajo. El segundo se fue a favor de España 40-34.
El tercer cuarto comenzó goleado en cambio al primer tiempo. España sacó 17 puntos de distancia. Tras un triple, dos pelotas al poste, y de generar situaciones desde el rompimiento que fueron la clave de la diferencia en el marcador. Canadá que estuvo baja, sin encontrar soluciones al respecto, y viendo como las europeas controlaban todo el tercer cuarto. El entrenador canadiense, faltando 7:33 minutos por jugar, se vio obligado a pedir minuto ya que su selección no podía contener el ataque rival. Canadá colocó goles de rebote, pero no le dio para achicar la diferencia de cara al último cuarto, finalizando 60-47, a favor de España. En el último cuarto las canadienses tras dos tiros desde la pintura y otro tiro exterior de tres, pudieron acortar la diferencia a seis. Hubo una gran reacción, con actitud y confianza para ir a romper en primera línea y buscar a la jugadora libre. Sin embargo, España tras un triple con fortuna impidió la reacción inesperada. Un partido que fue todo del conjunto europeo. En los últimos minutos del cotejo, España género situaciones estirando las posesión lo más posible, colocó la pelota al poste en repetidas ocasiones y nuevamente abrió 13 puntos de diferencia. El partido se lo llevó España por 76-66.
Las europeas terminaron invictas con lugar asegurado en cuartos, mientras que Canadá está bien posicionada para ser uno de los mejores terceros.
Serbia 65 - 61 Corea
El inicio del partido estuvo impregnado de mucha ansiedad por parte de ambas selecciones. Corea respondió desde la línea del libre pero no le dió para alcanza a Serbia, quien gobernaba el trámite. El score hasta ese momento estaba 9-1. Serbia era claro y contundente a la hora de atacar, rompía sin problemas el 1×1, y encontraba situaciones de 1×0, la estatura sacó cierta diferencia, y la colocación de la pelota en el posteo era una obligación. Los rebotes fueron de predominio serbio durante el primer cuarto. Corea no encontraba la forma de parar los ataques serbios, así que su entrenadora tuvo que pedir minuto para parar la intensidad de su rival. Tras el minuto pedido, apareció un rompimiento por el eje y dos aperturas a 45° grados para que llegaran los triples y lograran ponerse a 4 puntos (13-9). Se fue el cuarto 17-10 a favor de Serbia. El segundo fue casi un calco del primero, con la diferencia de que en este Corea logró contener por unos minutos el ataque rival. Modificó su defensa de zona, a una defensa muro. En ataque se empezó a soltar cada vez más, se animó a romper y dañar la zona, llegaron los tiros exteriores, logrando acercarse a una diferencia de 4 puntos, a falta de 7:33 por jugar. Aunque el balance no era del todo bueno para las coreanas. Serbia jugó la mayoría de ofensivas por cortinas indirectas, la jugadora que no tenía el balón, era quien anotaba, colocando previamente varias cortinas a espaldas coreanas. Corea a un minuto de terminar el primer tiempo colocó un triplazo, cerrando el cuarto a favor de Serbia 32-24
El inicio del tercer cuarto fue de gran intensidad defensiva en toda la cancha, llevando a doblar en cada esquina por parte de las serbias. Corea más eficaz en el ataque, encontró moviendo la bola la solución para poner dobles rápidos, con los que se colocó a 4 puntos, 36-32. Un cuarto que necesitó de rotación de ambas selecciones. Serbia no estaba certero, la confianza disminuía con el tiempo, y el nerviosismo jugaba un papel importante. Sin embargo, con algo de “suerte”, las serbias lograron colocar un triple que les dió un respiro. Tras volver al rectángulo, las coreanas comenzaron a ser más verticales, y desde un tiro exterior con marca empató el juego, dejando el score igual en 40 puntos. El match se volvió más estacionado, más pensativo. Las pérdidas eran castigadas por corridas 1×0. Corea dió pelea, sin rendirse, hasta lo último. En el partido supo estar 10 puntos por debajo, logrando por momentos ponerse a 1 tanto. Sin embargo, aparecía un triple más allá de los 6,75 metros, para abrir 4 puntos de renta, quedando 1:21 minutos por jugar del tercero. El tercer cuarto se fue a favor del conjunto europeo 50-44.
El inició del último cuarto se dió con la misma intensidad del tercero. Corea tras una seguidilla de defensas colectivas, evitó el avance de Serbia en el marcador. El conjunto europeo preocupado por anotar, sin encontrar respuestas, tuvo que empezar a rotar el banco, lo que le dió sus frutos. Sin embargo, las coreanas respondían rápido, con un bombazo, y una bandeja para estar a 2 puntos de cara a 7:25 minutos para el final del encuentro. Las pérdidas, y las faltas se empezaron a adueñar del juego. Una apertura coreana a la esquina, para lastimar de tres y pasar a las debías por primera vez en el partido, 58 a 56. En este punto la presión era toda para el conjunto europeo, quien logró nuevamente empatar. Las coreanas respondieron rápidamente con un triple, logrando la diferencia mínima. Sin embargo las serbias con su gran experiencia, tuvieron la capacidad de afrontar el problema, bajar la ansiedad y llevarse el juego en cifras de 65 a 61