-
Los checos abrieron hueco en el tercer cuarto y aguantaron a los brasileños en el último
-
La victoria de la República Checa comprime el grupo K y deja a todos con opciones en la última jornada
La República Checa se la jugaba a todo o nada ante los brasileños. Los checos no tenían red en caso de derrota y salieron con mucha intensidad y las ideas muy claras para hacer daño a los de Alexander Petrovic. Brasil respondió con la misma intensidad y el primer cuarto fue para la República Checa con los brasileños siempre a remolque en el marcador. Y el segundo periodo tuvo el mismo camino.
Los checos llegaron al descanso con 13 puntos de ventaja y los brasileños se descompusieron. No lograron abrir la defensa de la República Checa y se fueron mentalmente del partido. En la reanudación fue aún peor. Al inicio del tercer cuarto, los checos se pusieron 20 arriba y los brasileños anotaron 2 puntos en los primeros cuatro minutos y medio.
Brasil fue un despropósito hasta el final. Amagaron con una tímida reacción pero no lograron meterse nunca en el encuentro y asustar en el marcador a los checos. La Selección de Petrovic se complicaba mucho su futuro en la Copa del Mundo con la derrota porque el encuentro que les queda en el grupo es ante EEUU.