Puerto Rico tuvo que sudar su pase a la segunda ronda

 SAN JUAN (Clasificatorios de las Américas a la Copa del Mundo FIBA 2019) – Puerto Rico selló su pase a la segunda fase de las eliminatorias mundialistas, no sin antes pasar tremendo susto a un rival que vendió cara la derrota.

El conjunto puertorriqueño tuvo que descontar un déficit de doble digito en la segunda mitad y con un avance de 11-0 en los últimos tres minutos venció a una valiente Cuba, 84-80, ante casa llena en el coliseo Roberto Clemente en San Juan.

Puerto Rico colocó su marca en 3-2 en el grupo C de América y se une a los Estados Unidos y México como los clasificados a las ventanas que se jugarán desde el mes de septiembre. Puerto Rico irá en pos de asegurar el segundo lugar del grupo cuando reciba a México el domingo. Por su parte, Cuba se medirá ante Estados Unidos en La Habana.

“No esperábamos un juego tan cerrado, pero es bueno que nos pase. Se supone que no vengamos confiados y le faltemos el respeto a ningún rival. Gracias a Dios pudimos salir victoriosos. No lucimos como se supone lo hubiéramos hecho”, indicó el base Ángel Rodríguez a FIBA.com luego del encuentro.

 Rodríguez fue una de las bujías del banco para Puerto Rico al anotar 15 puntos y tres asistencias. David Huertas lideró el ataque local con 18 unidades, mientras José Juan Barea coló 15 puntos.

“Fue un juego malo (de Puerto Rico). Fallamos mucho tiro libre, pero nos mantuvimos en la defensa. Peleamos, batallamos, al final pudimos sacar la bola”, dijo Eddie Casiano, dirigente de Puerto Rico, en conferencia de prensa.

Luego de estar atrás en el marcador desde el segundo parcial, Ramón Clemente le dio la ventaja a los boricuas, 61-60, en el segmento final. Puerto Rico siguió con su energía y canasto en carrera de Gary Browne le dio alegría al público que vio como el equipo tomó el comando, 68-64.

Pero Cuba no se intimidó y mostró garra con su referente Yasiel Rivero, quien anotó cuatro puntos seguidos, sumado a un donqueo de Javier Justiz, para revertir el marcador, 75-70, a favor del visitante.

“Vinimos con mucha mentalidad. El entrenador nos propuso eso, que históricamente Cuba le ha dado batalla a Puerto Rico. Salimos con la mentalidad de hacer un buen juego”, dijo Justiz, quien solo anotó cuatro puntos, pero recuperó 10 rebotes.

 Puerto Rico no dejó escapar el encuentro y con un avance de 11-0 (incluidos siete puntos de Barea) volvió al comando, 81-75, con 36 segundo por jugar.

Cuba volvió a dar muestras de vida y triple de Yuniskel Molina cerró el juego, 82-80, antes que Huertas sellara la victoria con dos tiradas libres.

“La experiencia de Puerto Rico le hizo reaccionar. A nosotros nos sirvió mucho este juego. Nosotros jugamos un poco por encima”, dijo el técnico cubano José Ramírez.

Los cubanos fueron liderados con los 31 puntos de Rivero, quien fue puro veneno para Puerto Rico desde el saque.

Cuba no vino a ser una presa fácil. Aunque los boricuas sacaron rápidas ventajas de 11-4 y, más adelante, de 20-12, los cubanos no entraron en pánico. Gracias al eficiente Rivero, quien anotó siete puntos en el parcial para dejar cerca a la visita, 21-18, al cierre del primer segmento.

Puerto Rico mantuvo la delantera con un efectivo Rodríguez. Doble del base puso en control a los boricuas, 23-18. Pero, nuevamente, Rivero montó un espectáculo. Dos triples seguidos, más otro doble, Cuba silenció el coliseo Clemente, 32-26.

La ejecución ofensiva de los boricuas no fue la mejor hasta que Gary Browne y Barea se combinaron en el ataque para devolverle la delantera al local, 33-32.

Rivero anotó 12 puntos en el segmento por Cuba, pero no estuvo solo. Triples seguidos de Karel Guzmán y Osmel Oliva alejaron a la visita, 42-35, en el intermedio.

En los primeros 20 minutos, Puerto Rico no tuvo respuesta para el juego interior de los cubanos, que dominaron los rebotes 28-19, con nueve de Rivero. La brecha se cerró en la segunda mitad, aun así Cuba terminó con el juego con 45 rebotes, cuatro más que los boricuas.

En el tercer parcial, Cuba siguió de la mano de Rivero, quien con jugada de tres puntos alejó a los cubanos, 53-41. Ese déficit provocó cambios por parte del técnico Eddie Casiano al traer del banco a Rodríguez, Gian Clavell y Ramón Clemente. Rápidamente, Clavell anotó cuatro puntos seguidos, mientras Rodríguez anotó bandeja y Clemente electrificó el coliseo con un donqueo para cerrar la brecha, 60-59, con 10 minutos por jugar.

 

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