Survivor  “Invictus” y tricampeón nacional. El quinteto verdolaga subió al Olimpo de los máximos campeones revalidando el título al derrotar al Santa Tecla 70-60 en el segundo juego de la final femenina  y conseguir su décimo título de liga.

Survivor, con la dupla Aída Funes (25 puntos) y Sarah Rogers (26 puntos), consumó su segunda victoria en la final para llevarse otro título a las vitrinas de un Survivor de ensueño, siendo el mejor equipo de El Salvador en el baloncesto femenino.

La victoria no llegó fácil, Santa Tecla llegó con otra actitud, con más entrega, llevándose el primer cuarto 12-11, pero sufriendo en el segundo periodo al quedar abajo 37-27. A pesar de haber recortado distancias, el conjunto tecleño no tuvo mucha puntería, su efectividad fue pobre (36 %), muy distante a la Survivor que trabajó para un 48 % de efectividad en sus disparos.

Santa Tecla buscó reaccionar en el tercer periodo apoyado en el trabajo de Claudia Hernández y la cubana Arlenys Romero, quienes le dieron el empuje al equipo tecleño para mejorar y recortar distancias ante el equipo verdolaga que siguió luchando.

El juego cobró mucha emoción, había disputa, era la final y Santa Tecla sabía que tenía que darlo todo para emparejar la serie, por lo que se puso a cuatro puntos para iniciar los últimos diez minutos de juego.

Final y título

Para la etapa final el Survivor volvió a tomar la pelota como amo y señor, supo controlar y defender su aro, Kenia Campos asistió con mucha experiencia cada pelota y a la vez yendo a rescatar tableros defensivos que culminaron luego con anotaciones de Sarah Rogers o “la negra” Aída Funes para sentenciar el último juego de la temporada y dejar al Survivor como gran monarca invicto e imparable.

Una mención destacada merecen Norma Durán y Laura Rivas, quienes tuvieron una magnífica temporada adaptándose a la disciplina del entrenador,  “El Tucán” Juan Pablo Samour.

Ya es segundo

Survivor al conseguir su décimo campeonato, se convierte en el segundo equipo en obtener más campeonatos nacionales, solo por debajo del legendario Roble de San Miguel (12) y desbancando al mítico Dolofín (9) a la tercera posición de todos los tiempos.

Un logro más en el baloncesto femenino para este equipo que se está metiendo en la historia grande de un deporte que recobra cada vez más fuerza en el país.

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