FINAL FOUR 2014! Esta noche es la gran final del baloncesto de la NCAA. Kentucky versus Connecticut se juegan el título
FINAL FOUR 2014! Esta noche es la gran final del baloncesto de la NCAA. Kentucky versus Connecticut se juegan el título
Final Four NCAA 2014: Kentucky y Connecticut se juegan el título
NCAA Final Four 2014. Hoy lunes no habrá partidos en la NBA, porque hasta la mejor liga del mundo se detiene ante un evento del calibre del que se celebra esta madrugada: la gran final de la NCAA.
Una final en la que tenemos dos sorpresas, a pesar de la relevancia de su nombre, ya que Kentucky y Connecticut han llegado a este partido partiendo de las posiciones 8º y 7º de sus regiones, el ranking combinado más alto de dos equipos que han llegado hasta el último partido. Un hito que demuestra que a la hora de la verdad, lo que importa es lo que pasa dentro de la pista, y esta noche pasarán muchas cosas.
La gran final: Connecticut vs Kentucky
Se espera un partido muy igualado, con dos equipos acostumbrados a no darse por perdidos, que ya fueron capaces de darle la vuelta a marcadores adversos en sus partidos de semifinales, con lo que no nada habrá decidido hasta el último segundo del duelo entre Connecticut y Kentucky.
Unas universidades de Connecticut y Kentucky que a pesar de sus irregulares temporadas regulares (perdieron 18 partidos entre las dos), han sacado a relucir todo su talento y tradición ganadora en el momento más importante. Los Huskies, liderados por un Shabazz Napier que ya fue campeón hace cuatro años con Kemba Walker al lado, y Kentucky, ganador en el 2012 con Anthony Davis al mando (y con una lista inmensa de grandes estrellas en su roster en estos últimos tiempos: John Wall, Brandon Knight, DeMarcus Cousins, Anthony Davis…), han hecho prevalecer la calidad de sus jugadores precisamente en el momento más importante del curso.
napier-connecticut
Guerra en el exterior
Ambos equipos apoyan mucho su juego en las acciones de su bases y escoltas. El Connecticut tenemos a un Napier que tanto dirige como anota (más de 20 puntos por noche), muy bien acompañado por Ryan Boatright para formar un back court eléctrico y muy físico, a pesar de no ser ninguno muy alto. En Kentucky, en cambio, son los gemelos Harrison los que dominan el tempo, con Aaron como director de orquesta y Andrew como el killer en los momentos decisivos, ya que durante los encuentros su principal objetivo es alimentar a la amplia lista de portentos físicos que pueden finalizar cerca del aro: Randle, Young, Johnson, Poytress…
Julius Randle
Estamos ante el jugador con una mayor proyección de todos los que pisarán la pista esta noche, un claro Top 5 en el próximo Draft, alguien tan resolutivo al poste bajo como poderoso en el rebote. Un cuatro con un gran movimiento de pies que recuerda en acciones a Zach Randolph, aunque más estilizado en su físico, una presencia ante la que los Huskies no tienen respuesta en su plantilla, por lo que, a pesar de que vaya a ser un partido dominado por los guards, sobre sus poderosos hombros podría estar la clave del choque.
Sam Young vs DeAndre Daniels
Con todas las miradas puestas en Napier, que tanto puede lanzar desde el exterior (por encima del 50% en triples en las eliminatorias) como finalizar en penetración, es DeAndre Daniels, que ha llegado en una gran forma a esta recta final de temporada, el hombre encargado de dar otra alternativa al juego de ataque de Connecticut. Ante Florida, Daniels le hizo un roto a la defensa de los Gators, alternando algunos lanzamientos exteriores con mates en transición o con una mínima ventaja sobre su par, y esa será la forma en la que intentará atacar a Kentucky, sobre todo si le marcan Randle o Dakari Johnson.
Es de esperar que Calipari alterne en la defensa de Daniels a Randle y Sam Young o incluso Alex Poythress, dos jugadores con la velocidad suficiente como para hacerle frente o ralentizar su impacto ofensivo. De hecho, el papel de Young y Poythress (ambos brillaron en semifinales), será muy importante para los Wildcats, porque permitirán que la defensa no se cierre en demasía sobre Randle en el poste bajo o que los gemelos Harrison tengan opciones de un pase de canasta al buscar las penetraciones.
aaron-harrison-kentucky
La bola decisiva: Shabazz Napier vs Aaron Harrison
Si el partido llega a un final apretado, ellos se jugarán la última bola, eso sin duda. Napier ya ha demostrado a lo largo de esta March Madness su determinación en esos momentos y cuenta con la experiencia de sus cuatro años universitarios y ya saber lo que es jugar (y ganar) un partido de este calibre. En Kentucky, el tiro decisivo se lo jugará Aaron Harrison, que viene de anotar el triple de la victoria en los dos últimos partidos de su equipo. De hecho, el escolta de los de John Calipari suma nada menos que 9 puntos en los 39 segundos finales de los tres últimos tres encuentros de los suyos.
Brillantes precedentes
En los últimos años, ningún otro equipo ha llegado desde más atrás en un ranking para terminar llevándose el título que los Huskies. En el 2011, la Connecticut de Kemba Walker y Napier escaló desde el puesto 18 hasta el campeonato nacional, y en este 2014 llega a ese último encuentro desde el puesto 17 del país, con lo que pueden repetir hazaña. Un puesto 17 que comparten con Kentucky, pero los Wildcats añaden a ese factor el hecho de que en todos y en cada una de las cuatro ocasiones anteriores en las que jugaron la final, llegaron a estar 9 puntos abajo en el partido. Y en todas ellas remontaron para llevarse la victoria.
Esta claro que en el caso de estos equipos, rendirse no es una opción, y eso se nota en la cancha.
FINAL FOUR 2014! Esta noche es la gran final del baloncesto de la NCAA. Kentucky versus Connecticut se juegan el título
Final Four NCAA 2014: Kentucky y Connecticut se juegan el título
NCAA Final Four 2014. Hoy lunes no habrá partidos en la NBA, porque hasta la mejor liga del mundo se detiene ante un evento del calibre del que se celebra esta madrugada: la gran final de la NCAA.
Una final en la que tenemos dos sorpresas, a pesar de la relevancia de su nombre, ya que Kentucky y Connecticut han llegado a este partido partiendo de las posiciones 8º y 7º de sus regiones, el ranking combinado más alto de dos equipos que han llegado hasta el último partido. Un hito que demuestra que a la hora de la verdad, lo que importa es lo que pasa dentro de la pista, y esta noche pasarán muchas cosas.
La gran final: Connecticut vs Kentucky
Se espera un partido muy igualado, con dos equipos acostumbrados a no darse por perdidos, que ya fueron capaces de darle la vuelta a marcadores adversos en sus partidos de semifinales, con lo que no nada habrá decidido hasta el último segundo del duelo entre Connecticut y Kentucky.
Unas universidades de Connecticut y Kentucky que a pesar de sus irregulares temporadas regulares (perdieron 18 partidos entre las dos), han sacado a relucir todo su talento y tradición ganadora en el momento más importante. Los Huskies, liderados por un Shabazz Napier que ya fue campeón hace cuatro años con Kemba Walker al lado, y Kentucky, ganador en el 2012 con Anthony Davis al mando (y con una lista inmensa de grandes estrellas en su roster en estos últimos tiempos: John Wall, Brandon Knight, DeMarcus Cousins, Anthony Davis…), han hecho prevalecer la calidad de sus jugadores precisamente en el momento más importante del curso.
Guerra en el exterior
Ambos equipos apoyan mucho su juego en las acciones de su bases y escoltas. El Connecticut tenemos a un Napier que tanto dirige como anota (más de 20 puntos por noche), muy bien acompañado por Ryan Boatright para formar un back court eléctrico y muy físico, a pesar de no ser ninguno muy alto. En Kentucky, en cambio, son los gemelos Harrison los que dominan el tempo, con Aaron como director de orquesta y Andrew como el killer en los momentos decisivos, ya que durante los encuentros su principal objetivo es alimentar a la amplia lista de portentos físicos que pueden finalizar cerca del aro: Randle, Young, Johnson, Poytress…
Julius Randle
Estamos ante el jugador con una mayor proyección de todos los que pisarán la pista esta noche, un claro Top 5 en el próximo Draft, alguien tan resolutivo al poste bajo como poderoso en el rebote. Un cuatro con un gran movimiento de pies que recuerda en acciones a Zach Randolph, aunque más estilizado en su físico, una presencia ante la que los Huskies no tienen respuesta en su plantilla, por lo que, a pesar de que vaya a ser un partido dominado por los guards, sobre sus poderosos hombros podría estar la clave del choque.
Sam Young vs DeAndre Daniels
Con todas las miradas puestas en Napier, que tanto puede lanzar desde el exterior (por encima del 50% en triples en las eliminatorias) como finalizar en penetración, es DeAndre Daniels, que ha llegado en una gran forma a esta recta final de temporada, el hombre encargado de dar otra alternativa al juego de ataque de Connecticut. Ante Florida, Daniels le hizo un roto a la defensa de los Gators, alternando algunos lanzamientos exteriores con mates en transición o con una mínima ventaja sobre su par, y esa será la forma en la que intentará atacar a Kentucky, sobre todo si le marcan Randle o Dakari Johnson.
Es de esperar que Calipari alterne en la defensa de Daniels a Randle y Sam Young o incluso Alex Poythress, dos jugadores con la velocidad suficiente como para hacerle frente o ralentizar su impacto ofensivo. De hecho, el papel de Young y Poythress (ambos brillaron en semifinales), será muy importante para los Wildcats, porque permitirán que la defensa no se cierre en demasía sobre Randle en el poste bajo o que los gemelos Harrison tengan opciones de un pase de canasta al buscar las penetraciones.
La bola decisiva: Shabazz Napier vs Aaron Harrison
Si el partido llega a un final apretado, ellos se jugarán la última bola, eso sin duda. Napier ya ha demostrado a lo largo de esta March Madness su determinación en esos momentos y cuenta con la experiencia de sus cuatro años universitarios y ya saber lo que es jugar (y ganar) un partido de este calibre. En Kentucky, el tiro decisivo se lo jugará Aaron Harrison, que viene de anotar el triple de la victoria en los dos últimos partidos de su equipo. De hecho, el escolta de los de John Calipari suma nada menos que 9 puntos en los 39 segundos finales de los tres últimos tres encuentros de los suyos.
Brillantes precedentes
En los últimos años, ningún otro equipo ha llegado desde más atrás en un ranking para terminar llevándose el título que los Huskies. En el 2011, la Connecticut de Kemba Walker y Napier escaló desde el puesto 18 hasta el campeonato nacional, y en este 2014 llega a ese último encuentro desde el puesto 17 del país, con lo que pueden repetir hazaña. Un puesto 17 que comparten con Kentucky, pero los Wildcats añaden a ese factor el hecho de que en todos y en cada una de las cuatro ocasiones anteriores en las que jugaron la final, llegaron a estar 9 puntos abajo en el partido. Y en todas ellas remontaron para llevarse la victoria.
Esta claro que en el caso de estos equipos, rendirse no es una opción, y eso se nota en la cancha.
-Fuente: //diariodigitalbarahona.blogspot.com/