VITORIA. Se trata de la gran esperanza del nuevo Baskonia que verá la luz en las próximas semanas para recuperar el instinto depredador que le ha faltado a su juego exterior desde que Igor Rakocevic abandonara el Buesa Arena. Reggie Williams aterriza en Vitoria precedido por sus notables actuaciones en la ahora clausurada -al menos temporalmente- NBA y consciente de que su currículo y la elevada porción del presupuesto azulgrana que se lleva su ficha le convierten en una referencia ineludible dentro del equipo. Una situación que no le amedrenta en absoluto. Así lo reflejó con claridad ayer durante su presentación oficial -una vez superado el reconocimiento médico- con la elástica del Caja Laboral, donde asumió sin reparos la responsabilidad de liderar la faceta anotadora del equipo. "Estoy dispuesto a cubrir ese papel. Siempre he sido un jugador que anota pero también que hace jugadas, así que no me importa si anoto yo o lo hace un compañero. Jugar en esta posición no es nuevo para mí y lo haré lo mejor que pueda", significó el nuevo killer baskonista.

Williams, que lucirá el número 55 en la parte posterior de su camiseta, desveló también otra de las incertidumbres que le ha acompañado desde que se supo de su incorporación al Caja Laboral. ¿Viene a Europa de visita a la espera de que se reabra la liga profesional americana o descarta por completo abandonar el barco vitoriano mediada la competición? El escolta de Virginia disipó cualquier atisbo de duda respecto a su futuro. "He firmado un contrato de un año y mi intención es estar aquí hasta el final y disputar todos los campeonatos", zanjó. Sin duda en esta decisión también tendrá un importante peso la indemnización de un millón de dólares con la que debería compensar a la entidad de Zurbano en el caso de querer regresar a la NBA antes de tiempo.

No obstante, el jugador norteamericano también ofreció argumentos con los que tratar de sostener su su momentáneo olvido de la mejor Liga del mundo. "El Baskonia me ha dado la oportunidad de jugar en Europa y vengo a ayudar a ganar al equipo. Con la incertidumbre que hay ahora mismo en la NBA esta era la mejor elección para mí. Además es un equipo que está entre los mejores tanto en Europa como en la ACB, así que es un nivel alto de competición y no creo que esté perdiéndome nada", reseñó.

ADAPTACIÓN Reggie Williams se refirió también a las diferencias existentes entre el baloncesto europeo y el americano y, en este sentido, consideró que su etapa en el Dijon francés puede servirle de gran ayuda en esta nueva aventura. "Está claro que los estilos de juego de la NBA y la competición europea son diferentes y es duro adaptarse porque los partidos de la NBA son más abiertos, pero para mí tener experiencia anterior en Europa es un punto positivo. Yo creo que no me va a costar tanto como podría costarle a otro americano que no haya jugado nunca aquí", apuntó.

Por último, el nuevo escolta baskonista se enfrentó también a la fama que le precede de defensor no demasiado consistente y se mostró dispuesto a adaptarse sin excesivos problemas a los planteamientos de Dusko Ivanovic. "Habiendo estado ya con el entrenador entiendo que lo que quiere es un estilo de defensa agresivo y estoy listo para darle lo que pide. Es parte del juego, éste es su equipo, su manera de jugar y estoy preparado para ofrecerle lo que me exija".

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