Tras perderse los últimos seis partidos, y 18 de los últimos 28, Kyrie Irving volvió a la alineación de los Mavericks. Por vigesimotercera vez esta temporada, Jason Kidd pudo usar a sus dos estrellas, que han jugado solo 503 minutos juntos en lo que va de curso. Siguen fuera Dereck Lively II y Dante Exum, aunque Dallas también ha recuperado a Maxi Kleber en la pintura. Y justo recuperaron activos la noche que se veían ante unos Sixers que no tuvieron a Joel Embiid, pendiente de pasar por quirófano para solucionar un problema en el menisco de la rodilla. Y tardaron en encontrar el ritmo, pero cuando lo hicieron, pasaron por encima de los Sixers: 65-45 en la segunda parte y triunfo clave.

Primero porque por primera vez en mucho tiempo, los Mavs no necesitaron una exhibición de Doncic. El esloveno venía de promediar 40,9 puntos y dobles figuras en puntos y rebotes en sus últimos siete partidos: se quedó en 19 tantos, con 8 rebotes, 3 asistencias y algo errático en el tiro, con 6/15. Segundo, porque Irving volvió a ser su mejor versión en la segunda parte. Al descanso llevaba 7 puntos y un 3/8 en tiros; en el segundo tiempo se fue a los 16 en 17 minutos, fallando únicamente dos lanzamientos, con además 5 rebotes y otras 5 asistencias para las 8 totales que dio. Y porque en una mala noche de Tim Hardaway Jr, con 0 puntos y fallando todos los tiros que probó, ganaron fácil. 

Josh Green aportó 20 con 4 triples, Maxi Kleber otros 14 y desde el banco Grant Williams y Jaden Hardy metieron 14 y 17 respectivamente, la mayoría en el último periodo. Un esfuerzo colectivo para un equipo que venía siendo un monólogo de Doncic. Y que respondió al envite de los Sixers. Un palmeo de Kelly Oubre Jr ponía a Philadelphia 70-69 por delante, a mitad del tercer cuarto. Desde entonces, Dallas cerró el partido con un parcial de 49-32, incluyendo un 10-0 que reventó cualquier ilusión del equipo de Nick Nurse de ganar. Hasta Tyrese Maxey, que venía de meter 51 y consiguió siete en el primer minuto y medio tuvo una mala noche con solo 15 puntos. Oubre con 19 fue el máximo anotador, con Tobias Harris anotando 17.

Philadelphia está quinta, a dos partidos y medio de la tercera posición que llevaba controlando toda la temporada y tiene a Indiana a solo tres partidos por detrás. La ausencia de Joel Embiid, que podría estar fuera meses, puede acabar siendo un problema mucho más grave si les toca enfrentar en primera ronda contra Boston, Milwaukee o New York. Y sin su MVP, las opciones ofensivas desaparecen. Volvieron a tirar por debajo del 45% de campo y no llegaron al 28% (8/29) en el triple, pese a dominar el rebote ofensivo y los puntos en la pintura. Tiene trabajo Nick Nurse, y depende de las rodillas de Embiid saber cuál es el techo de estos Sixers. O si volverán a caer antes de llegar a las finales del Este.

 

Nadie puede frenar a los Cavaliers. El equipo de Donovan Mitchell volvió a ganar, esta vez en casa ante los Kings, en un partido donde pusieron la directa en la primera parte y no volvieron a mirar atrás. Ni el triple-doble de Domantas Sabonis, que llegó a las dobles figuras a los tres minutos de la segunda parte. El lituano acabó con 12 puntos, 15 asistencias y 19 rebotes, pero poco que hacer ante el poderío ofensivo de Cleveland. Mitchell lideró a todos los anotadores con 29, con Max Struss poniendo 22 y 6 triples, y Jarrett Allen aportando 19. Y los Cavaliers ya están segundos, a cinco partidos de Boston y con 2.5 partidos de ventaja sobre los Sixers por el factor pista.

Anthony Davis hizo de todo en la victoria de los Lakers en Charlotte. El interior firmó un triple-doble, consiguiendo su máximo de carrera en asistencias en un duelo que pudo haber sido una paliza y que los Lakers tuvieron que ganar en el clutch. Un triple de Brandon Miller dejaba el partido en cuatro puntos a falta de dos minutos, pero aparecía LeBron James para sentenciarlo. Miles Bridges y el novato Miller se combinaron para 74 puntos y 10 triples, pero el big-3 de los Lakers aguantó el empuje de los Hornets. LeBron y Davis metieron 26 y D'Angelo Russell se fue a los 28. Y los Lakers suman tres triunfos seguidos en la gira por el Este tras ganar a Boston, New York y ahora Charlotte. El próximo partido será en casa, el jueves, una vez se haya cerrado el mercado de fichajes. ¿Ha jugado su último encuentro de oro D'Angelo?

También los Clippers siguen imparables. En Atlanta, dos de los mejores ataques se encontraron en lo que fue un recital ofensivo con ambas franquicias superando los 140 puntos. Kawhi Leonard fue el mejor, con 36 puntos en 20 tiros, acompañado por el doble-doble de James Harden (30 puntos, 10 asistencias y 8 rebotes) y los 18 tantos de Paul George. Y desde el banco, Westbrook, Coffey y Powell acompañaron con 13 cada uno. Para los Hawks, cinco jugadores acabaron por encima de los 18 puntos, con Trae Young siendo el mejor con 25 y 12 asistencias. Y cierran una serie de seis partidos en casa con 4-2, soñando con el play-in. Siguen décimos. Al contrario, los Clippers se mantienen terceros, pero con opción de asaltar la primera posición: Oklahoma y Minnesota llevan dos partidos más. 

No hay partido sin sufrimiento para los Warriors. En los últimos 10 días cayeron por uno ante los Kings, en doble prórroga ante los Lakers y tras ganar a las lesionadas Philadelphia y Memphis, cayeron en Atlanta en la prórroga. Anoche, en Brookly, no necesitaron tiempo extra para ganar pero casi. Un partido donde Steph Curry metió todos los triples del equipo, cuatro, y 29 de los 109 puntos del equipo. Otra vez fue Jonathan Kuminga la segunda espada del equipo de Kerr, que no pudo contar con Andrew Wiggins y que vio a Klay tener una mala noche. Nic Claxton se fue expulsado en el último cuarto por una flagrante tipo 2 sobre Podziemski y los Nets que ya piensan en el jueves: equipo que será muy relevante en el mercado de fichajes.

En el último partido de la jornada, los Pelicans pasaron por encima de Toronto, en segunda noche de back-to-back en la paliza de la noche. Los 41 puntos de Brandon Ingram, muchos de ellos en el 36-19 del primer cuarto, abrieron la brecha de un partido que Toronto no pudo competir. Sin RJ Barrett, baja por lesión, y perdiendo a Gary Trent Jr antes del descanso, el partido sirvió para que Gradey Dick metiera 20 puntos en el tiempo de la basura. Y New Orleans, sin hacer ruido, se sitúa a solo medio partido de la quinta posición.

 

 

 

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