Trabajo. Este joven es uno de tres promesas que tiene en nueva carpeta Asociación NY
Un fenómeno criollo será requerido NCAA
Joey de la Rosa es un baloncestista dominicano que emerge como una promesa y es requerido por varias universidades debido a sus potencialidades atléticas. De la Rosa, cuya padre es nativo de El Seibo y su madre de Santo Domingo, reside en El Bronx, Nueva York, pero cursa su último año de high school en Montverde Academy, en Monteverde, Florida. Este muchacho, de 6’11” y 240 libras, probablemente se deslizará por debajo del radar de los grandes nombres que saldrán hacia el baloncesto universitario en 2011. De acuerdo a los reportes recibidos por la Asociación de Baloncesto de Nueva York, que preside Pedro Pablo Pérez, este joven está crudo, pero ha mejorado notable y rápidamente en los dos extremos de la cancha. De la Rosa posee un gran y rápido movimiento en giro a la línea de fondo, que puede terminar con un explosivo donqueo. Es un excelente reboteador, especialmente en el extremo ofensivo, donde es una amenaza por su atletismo en forma agresiva si no es controlado. Ese mismo reporte plasma que Joey debe trabajar en el desarrollo de un movimiento que permita un tiro corto en caso de ser negado la línea. También indica que debe seguir trabajando en la caja torácica de su cuerpo, mientras se prepara para los rigores del baloncesto universitario. Al término del año escolar, De la Rosa será uno de los jugadores a observar por los busca talentos de escuelas secundarias. El desarrollo de sus habilidades determinará su propio ascenso y, por ende, su cotización para enrolarse en una universidad de prestigio. De momento, De la Rosa es interesado por Fordham y St. John’s, de quienes ha recibido cartas de intención; Hofstra, Massachusetts, Pittsburgh, Providence, West Virginia y Xavier. Más reciente, asistió a un campamento en Los Angeles, tan cerca como en diciembre pasado, donde habló en español a su interlocutor y confirmó las procedencias de sus padres, sus condiciones atléticas y sus posibilidades de ser reclutado por una universidad de renombre.