Houston Rockets viaja a Oakland con el objetivo de lograr una segunda victoria, mientras Golden State Warriors quiere certificar la eliminatoria en casa

Houston Rockets viaja a Oakland con el objetivo de lograr una segunda victoria, mientras Golden State Warriors quiere certificar la eliminatoria en casa.

Rockets y Warriors

Rockets y Warriors

Stephen Curry y Golden State Warriors descubrieron lo difícil que puede ser alcanzar un campeonato en la derrota que sufrieron en el cuarto partido de la eliminatoria en Houston cuando el MVP de la NBA se topó de frente con una derrota no esperada que significaba, por otra parte, el inicio de una posible remontada de Houston que poría echar a perder todo el trabajo de la temporada. A pesar de ello, los Warriors han intentado tomarse de la derrota a modo de recordatorio, lo cual significa para ellos que nada está conseguido hasta que no se alcanza.

Golden State tiene otra oportunidad esta noche en casa para alzarse con el campeonato de la Conferencia Oeste y, al mismo tiempo, obtener una plaza para la Final de la NBA por primera vez en 40 años. El equipo se muestra concentrado para conseguir el objetivo hoy mismo y, de esta forma, evitar que el rival pueda aferrarse a una posible remontada que pueda complicarle las cosas. “Simplemente no queremos volver a Houston. Sabemos que no será fácil porque nos enfrentamos a un equipo que está ahí por méritos propios. Tenemos que salir a la cancha y jugar con más intensidad, unidos, solamente de esa manera ganaremos el partido”, comentó Klay Thompson sobre el próximo encuentro en casa.

En el anterior encuentro saltaron todas las alarmas cuando ocho meses de trabajo peligraron. Ello sucedió cuando Curry saltó mientras Trevor Ariza lanzaba en el segundo cuarto del partido del pasado lunes. Ariza lo vio y paró el lanzamiento de forma brusca provocando que Curry cayera sobre él. La cabeza de Curry fue a dar contra la pista y sus brazos se doblaron. El jugador permaneció en la pista varios minutos, y finalmente abandonó el partido algo mareado. En la segunda parte del encuentro volvió tras haberse sometido a las pruebas pertinentes para descartar una posible lesión craneal. “Podría haber sido mucho peor”, comentó Curry a propósito de su caída.

El entrenador de los Warriors, Steve Kerr comentó el martes, el día en el que ambos equipos viajaban, que Curry estaba bien, que solo tenía una contusión en la cabeza y que estaría listo para disputar el quinto encuentro en casa.

Houston, por su parte, también podría perder a un jugador clave en un instante, pero por una razón diferente a la anteriormente relatada. Dwight Howard, que recibió una falta en el inicio del tercer cuarto al impactar su codo contra la cabeza de Andrew Bogut y podría haber sido sancionado con un partido por acumulación de faltas. Con la ayuda de Howard, los Rockets están tratando de conseguir aquello que no ha logrado nadie, remontar una eliminatoria para pasar a una Final tras haber perdido en los tres primeros choques de la misma.

La verdad es que el equipo no parece asustado por la misión. Ya se encontró en una situación parecida cuando logró remontar un 3-1 en la anterior eliminatoria cuando Los Angeles Clippers lo tenían todo a favor, así es que el equipo cree que la experiencia les ha preparado para afrontar cualquier situación por dura que sea. “Nuestra temporada pasa por ganar este partido fuera de casa. Esto no es nuevo”, comentó McHale sobre este quinto choque.

Para el partido de esta noche habrá que tener en cuenta los lanzamientos desde la línea de tres. Ambos equipos se han mostrado fuertes en este campo a lo largo de toda la temporada. En el cuarto partido, los Warriors encestaron hasta en 20 ocasiones desde la línea de tres, mientras que Houston lo hizo hasta en 17 ocasiones. Entre ambos establecieron un nuevo record NBA en cuanto a mayor número de triples combinados entre dos equipos en un solo partido de playoffs. Será interesante ver si alguno de los dos es capaz de hacer algún ajuste defensivo para evitar que el rival lance desde esa línea.

Por otra parte habrá que seguir de cerca el desempeño de las dos estrellas de ambos equipos. Curry anotó 40 puntos en la victoria de Golden State en el tercer partido por 115-80, mientras que Harden logró 45 puntos en la victoria de Houston en el cuarto por 128-115. Ambos equipos siguen contando con ellos para conseguir la próxima victoria.

Y, finalmente, ambos equipos cuentan con la mejora notable de algún jugador que no ha estado muy acertado de cara a los disparos anteriormente. Josh Smith anotó 20 puntos, incluyendo 3 canastas desde la línea de 3 en el cuarto partido, y Klay Thompson, finalmente, también encontró su tiro en la primera parte del partido. El jugador anotó 24 puntos y logró anotar hasta en 6 ocasiones desde la línea de 3.

Así pues, si los Rockets quieren sacar la eliminatoria adelante, algo que sería histórico, habrán de hacerlo ganando dos partidos fuera de casa, en casa de Golden State. Los Warriors se sitúan con un parcial de 45 victorias por tan solo 3 derrotas en el Oracle Arena, incluyendo el parcial de 6-1 logrado en estos playoffs. La verdad es que Houston jugó bien en los dos primeros partidos allí, pero perdieron por 110-106 y por 99-98. De hecho, la última victoria del equipo en Oakland se produjo el 13 de diciembre de 2013.

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