Uno de los equipos con más solera de la historia de la Major League de beisbol, los Dodgers, tienen nuevo comprador. La franquicia angelina ha sido vendida a un grupo de inversores que incluye, entre otros, a una auténtica institución de la ciudad californiana: Earvin “Magic” Johnson.
El legendario base será así uno de los propietarios de los Dodgers, que serán controlados en el día a día por Mark Walter, director ejecutivo de la empresa de servicios financieros Guggenheim Partners. La franquicia había sido declarada en bancarrota en junio de 2011, situación que ha forzado la venta por valor de 2.000 millones de dólares (algo más de 1.500 millones de euros), según ESPN, por parte de su anterior propietario Frank McCourt.
Magic Johnson ya fue propietario minoritario de los Lakers, equipo en el que aún es formalmente vicepresidente, entre 1994 y 2010, siendo su única experiencia financiera en una franquicia deportiva. Los Dodgers, nacidos en el barrio neoyorkino de Brooklyn en 1883, y afincados en Los Angeles desde 1958, será la nueva aventura de uno de los mejores jugadores de baloncesto de todos los tiempos.
