Una jornada, quince partidos, 30 equipos y casi todo por decidir en la NBA. Porque salvo el líder del Este y el duelo entre Clippers y Mavericks en el Oeste, todo estaba en el aire. Y lo que podía haber una noche histórica, se vio empañado por el miedo de algunas franquicias, que prefirieron perder haciendo cálculos en directo a ganar, al menos en el Este. Porque en la conferencia rival casi todos tenían algo en juego, y se han quedado unos playin preciosos, con Lakers ante Pelicans, Warriors con Sacramento. Aunque el plato fuerte es un Miami Heat contra Philadelphia 76ers por la séptima plaza.

 

Dos peleas en el Este y casi todos pendientes del Orlando ante Milwaukee. Porque los Bucks dependían de sí mismos para lograr el segundo lugar, y los Magic necesitaban ganar para ser quintos, pero solo podía llevarse el partido uno. Y mientras, el resto de la conferencia esperaba y hacía cuentas sobre qué resultado beneficiaba más, no siempre con la victoria en mente. Porque dos de los tres de arriba, Bucks y Cleveland, prefirieron perder para evitar al rival del playin: Philadelphia o Miami. Eligieron evitar a dos de los favoritos en primera ronda, dejando en bandeja el segundo puesto a New York, de la mano de los 40 puntos de Jalen Brunson, aunque necesitaron una prórroga ante Chicago. Los Bucks son terceros y Cleveland cierra el top-4, todos por detrás de Boston que no se jugaba nada. 

Los de abajo sí ganaron todos, porque ellos sí lo necesitaban de verdad, con el objetivo de evitar el playim. Orlando se quedó quinto tras aplastar a los Bucks, que dejaron de jugar a mitad del tercer cuarto. Los Pacers le metieron 157 puntos a los Hawks, su cuarto partido de 150+ puntos (tres fueron ante Atlanta) en la temporada y son sextos. Vuelven a playoff por primera vez desde 2020, y con plaza directa, dejando los dos billetes de playin para equipos que el año pasado pisaron semifinales de conferencia. Philadelphia es séptima, Miami octava, tras ganar ambos cómodamente ante Brooklyn y Toronto en casa, con Chicago y Atlanta cerrando el top-10 de equipos que jugarán postemporada. El miércoles se celebran los dos primeros partidos de playin con la final el viernes.

Hubo más partidos, algunos sin nada en juego. Los Celtics ganaron a Washington para cerrar el año con 64 triunfos, la cuarta cifra más alta de su historia, pese a no tener a sus seis mejores jugadores. Payton Pritchard metió 38 puntos con 12 asistencias y 9 rebotes. Boston acaba un año histórico y sale como el favorito de la conferencia para llegar a las finales, como en 2022, pero espera un camino complicado desde la primera ronda.

   

En el Oeste las luchas eran tres, repartidas en la parte alta, media y por los tres últimos lugares del playin. Y con varios duelos directos que le dieron un extra de emoción. Ganaron los Thunder, que destrozaron a los suplentes de Dallas, y se quedaron con el primer puesto, con Denver segundos. El +49 es la segunda mayor paliza recibida en la historia de los Mavericks. El campeón se aprovechó de la derrota de Minnesota, en casa ante los Suns, para recuperar el segundo lugar y la posibilidad de una revancha contra los Lakers en el horizonte. La derrota de Minnesota, además, implicó que Phoenix pudiera robar la sexta posición a New Orleans, el partido con más en juego, y que los Suns dominaron con un 44-22 en el primer cuarto y 36 puntos de Bradley Beal.

Los Pelicans se vieron sorprendidos por los Lakers en casa en una exhibición de LeBron James. El jugador de 39 años hizo de todo y todo bien para ganar, acabando con un triple-doble (28 puntos, 17 asistencias, 11 rebotes) que deja a los Lakers octavos y necesitando una sola victoria para meterse en los playoff. Si ganan el martes, contra los Pelicans, jugarán contra Denver. Y con el triunfo angelino, la resolución del Oeste fue mucho más sencilla. La victoria de Los Angeles, unida a la paliza de los Kings ante Portland, implicó que el partido de los Warriors no tuviera ningún valor. Hicieron ambos los deberes, eso sí, pero se verán el martes en el duelo entre el noveno y el décimo. Necesitan dos triunfos para meterse en playoff.

Dos partidos más sin mucho en juego más allá de las estadísticas. Los Clippers cayeron en casa ante los Rockets en un partido donde todas las estrellas descansaron, y San Antonio, sin Victor Wembanyama, sumó una nueva victoria. La derrota evitó que los Pistons superaran a Washington en la clasificación, quedándose a solo un partido pese a sumar 28 derrotas seguidas a principio de temporada.